Dos ciudades en Europa con colonias felinas
24-01-2019
ROMA
El Largo di Torre Argentina es una plaza de la ciudad de Roma que contiene cuatro templos romanos republicanos y los restos del Teatro Pompeyo.
En esta plaza se ubica el Santuario de los gatos llamado así por todos los ciudadanos romanos.
Es muy interesante acceder a la web del Santuario Romano de los gatos para conocer su historia: os dejamos el enlace por si os interesa, pero vamos a explicar un poco la historia de la formación de esta macro colonia http://www.romancats.com/torreargentina/en/introduction.php.
Torre Argentina es el hogar de 150 amigos felinos, protegidos entre los templos más antiguos de Roma. En 1929 cuando se excavó la zona y quedó como área protegida (por debajo del nivel de la calle), fué el lugar escogido por los felinos abandonados para refugiarse. Desde ese año y hasta 1993, las gattare eran las señoras que se encargaban de su alimentación y cuidados y, es a partir de ese año cuando empiezan a esterilizar para controlar la población felina que debido al abandono crecía sin control.
De manera paulatina, sin descanso y con la ayuda y supervisión de entidades y personas altruístas la organización consiguió muchos logros y reconocimiento y es en 2001 cuando los gatos de Roma se convirtieron en un “patrimonio biocultural” mediante una proclamación especial del ayuntamiento.
La organización trabaja incansablemente y cuenta con un voluntariado organizado y eficiente que trabaja los 365 días al año.
ÁMSTERDAM
En esta ciudad se encuentra el Poesenboot (barco de los gatos).
Todo empezó en 1996 cuando la señora Hernriette encontró una pequeña familia de gata y gatitos debajo de un árbol. Los recogió y atendió en su casa y muchas personas le llevaban los gatitos que encontraban abandonados, pronto se convirtió en la "señora de los gatos" y en 1968 compró un barco que atracó enfrente de su casa y lo acondicionó con la ayuda de voluntarios para transformarlo en un alojamiento sólo para los felinos. Se compraron dos barcos más para el mismo propósito hasta que en 2002 se reacondicionó el más grande de ellos y se consiguió que se reconociera como una institución a favor de los animales.
En la actualidad The Catboat Foundation sigue con su objetivo: hacerse cargo de los gatos abandonados de la ciudad de Ámsterdam y proporcionarles un futuro mejor.
Os proporcionamos el link por si queréis pasearos por su web: https://depoezenboot.nl/en